Caramanta es un tranquilo pueblo de Antioquia escondido entre las montañas. A pesar de no tener muchas actividades para realizar dentro del pueblo, la hermosa arquitectura colonial y el tranquilo ambiente del pueblo son suficientes para ameritar una visita. Caramanta es un excelente destino para disfrutar de una estadía tranquila y calmada, a diferencia de otros pueblos turísticos de Antioquia.
Índice:
- Mejores lugares para comer en Caramanta
- Mejores lugares para visitar en Caramanta
- Mejores lugares para hospedarse en Caramanta
- La historia de Carlos Gardel en Caramanta
Mejores lugares para comer en Caramanta
⭐️ Truchera El Molino / $ / Google Maps
Trucheria El Molino es un restaurante a 15 minutos caminando de la plaza principal, por un camino campestre. Su especialidad son las truchas, pero también ofrece carne de res y otras carnes. Aquí tienes la opción de pescar tu propia trucha en el lago o pedir una del menú. Si eliges pescar tu propia trucha, el valor se calculará dependiendo del peso y se sumará la preparación. Si prefieres la trucha del menú, cuyo peso es de aproximadamente 230 g, la bandeja cuesta alrededor de 15.000 pesos. La bandeja incluye sopa, arroz, patacón, ensalada y bebida.
Entre las opciones de preparación de la trucha, puedes escoger frita o al ajillo. Nosotros escogimos al ajillo y nos encantó. La sazón de la trucha estaba deliciosa y la ensalada tenía un toque dulce muy rico. Las salsas para acompañar el pescado también estaban muy ricas, especialmente la tártara.
El restaurante tiene una vista a la naturaleza muy agradable y el trayecto desde la plaza principal también tiene unas vistas muy bonitas. El restaurante olía un poco a pescado, pero es de esperarse de una truchera, donde crían y tienen lagos de truchas cerca del restaurante.
En conclusión, Trucheria El Molino es un agradable lugar para comer, con excelente comida, porciones generosas y precios razonables.
Horario: Lunes – domingo: 9:00 AM – 5:00 PM
Café Pilsen / $ / Google Maps
Café Pilsen, ubicado en diagonal a la iglesia principal en la plaza principal, es el típico café y bar de pueblo donde los locales van a pasar el rato, jugar cartas y billar, y tomar algo. De todos los lugares que visitamos en Caramanta, este era el más animado y visitado por los locales. Aquí puedes esperar un ambiente animado y típico de pueblo.
M Cafe Restaurante / $ / Google Maps
“M” Café y Restaurante ofrece opciones de almuerzo un poco más gourmet en comparación con otros restaurantes de Caramanta. Además de sus opciones a la carta, su menú del día ofrece opciones más variadas y menos tradicionales. Cuando comimos aquí, el menú del día incluía una crema de cebolla y un pollo en salsa de champiñones, todo con muy buena sazón y en porciones generosas. Un almuerzo cuesta entre $15.000 y $20.000 pesos, aproximadamente.
Restaurante la Casona / $ / Google Maps
La Casona es un restaurante sencillo con excelentes opciones para almorzar. Siendo un restaurante cuyo enfoque parece ser más para los locales, aquí no encontrarás menú ni opciones elaboradas. Lo que sí encontrarás son menús del día típicos con muy buen sabor y a buenos precios. Comer aquí se siente como ser invitado a comer a la casa de un familiar que cocina comida típica muy rica.
Horario: Lunes – domingo: 7:30 AM – 7:30 PM
Gelato Heladería / $ / Google Maps
Para tus antojos de dulce, Gelato Heladería es el lugar que te recomendamos. Ubicado en la plaza principal, con un bonito local y mesas al aire libre, este lugar es una buena opción para comer un helado, malteada, crepe o un postre.
Horario: Lunes – viernes: 1:30 – 9:00 PM, sábado – domingo: 11:00 AM – 8:30 PM
Café Pasion / $ / Google Maps
Para tomarte un café un poco más gourmet de lo que encontrarás en cafés típicos de Caramanta, Café Pasión es un excelente lugar para visitar. En su carta puedes encontrar cafés preparados en distintos métodos, como prensa francesa, V60 y Chemex, entre otras opciones.
Mejores lugares para visitar en Caramanta
⭐️ Parque Principal / Free / Google Maps
En el parque principal es donde podrás encontrar más actividad y movimiento, tanto de locales como de turistas. Encontrándose en muy buen estado, el parque cuenta con agradables árboles y jardines para disfrutar de la naturaleza. Además de esto, también podrás ver varios monumentos relacionados con la historia y la cultura de Caramanta.
El primer monumento es el de Carlos Gardel, uno de los artistas de tango más famosos que murió trágicamente en un accidente de avión en la ciudad de Medellín. Pero, ¿por qué se encuentra este monumento en Caramanta? Esto se debe a que los restos del artista de tango pasaron por este pueblo en su retorno a Buenos Aires, Argentina, en un viaje que incluyó transporte en tren, buses, mulas e incluso botes de vapor. Puedes conocer más sobre esta historia en la sección de abajo “Carlos Gardel en Caramanta”. Hoy en día se busca promover este legado cultural a través de la ruta gardeliana.
El segundo monumento es un homenaje a la ruana, un tipo de poncho sin mangas y con un hueco en el medio para insertar la cabeza. Otra forma de describirlo podría ser una cobija con un hueco en el medio. Aunque la ruana no es exclusiva de Colombia ni de Antioquia, Caramanta se le atribuye el nombre de “Capital de la Ruana”. La ruana se usa generalmente para el frío y en el pueblo se puede ver cómo la gente la porta, especialmente los señores de mayor edad.
Parque Educativo / Free / Google Maps
El parque educativo de Caramanta es un espacio abierto al público con distintos atractivos para visitar. Cuenta con una terraza-observatorio desde donde se puede disfrutar de una hermosa vista del pueblo, y en días despejados se puede ver el Nevado del Ruiz. Además de la vista, se pueden encontrar distintos puestos de comida rápida y uno donde venden pizzas. Este lugar es ideal para pasar la tarde, contemplar el paisaje y disfrutar de algo delicioso.
Iglesia de la Inmaculada Concepción / Free / Google Maps
Construida entre 1919 y 1934, esta iglesia de estilo neogótico fue diseñada por los arquitectos Tomás Uribe de Colombia y Agustín Goovaerts de Bélgica. Agustín Goovaerts es el mismo arquitecto que diseñó obras de interés cultural en Medellín, como el Palacio Nacional y el Palacio de la Cultura Rafael Uribe Uribe, además de la iglesia Nuestra Señora del Carmen en Abejorral, Antioquia, entre otras.
El reloj del templo, las campanas y el órgano, marca E. F. Walcker & Cie, de la iglesia fueron traídos de Alemania, mientras que el mármol utilizado en su construcción fue traído de Carrara, Italia.
Mejores lugares para hospedarse en Caramanta
⭐️ Hotel El Abuelo (Ver disponibilidad aquí)
El Hotel El Abuelo es una excelente opción de alojamiento en Caramanta. Las instalaciones del hotel están en excelentes condiciones y las habitaciones son amplias, limpias, y cuentan con baño privado y wifi. Además, el personal del hotel es muy atento y amable.
El costo de una noche en el hotel varía entre 50.000 y 60.000 pesos por persona, aproximadamente.
En el hotel se rinde homenaje a Carlos Gardel, ídolo del tango que murió trágicamente en Medellín en 1935 en un accidente aéreo. Los restos del artista fueron transportados por tierra desde Medellín hasta Buenaventura, pasando por distintos pueblos, entre ellos Caramanta.
En el Hotel El Abuelo se cuenta la historia de que la comitiva que transportaba los restos de Carlos Gardel se detuvo en Caramanta para pasar la noche, alojándose en el mismo edificio que hoy en día es el Hotel El Abuelo, pero en aquel entonces se llamaba Hotel de Parrita.
Hotel La Ruana / 314-829-5333 / Google Maps
El Hotel La Ruana es una buena opción de hospedaje en Caramanta. El lugar se ve limpio y agradable, y cuenta con un café al lado llamado Moka Coffee Bar, donde puedes disfrutar de un café de la región. El costo aproximado de la estadía es de entre 40.000 y 60.000 pesos.
La Historia de Carlos Gardel en Caramanta
La historia de Gardel forma parte de lo que hoy en día se busca promover en Caramanta como la Ruta Gardeliana. Esta ruta hace referencia al largo trayecto que los restos de Gardel tuvieron que recorrer por Colombia después de su muerte en Medellín para llegar a Buenos Aires. La historia involucra todo tipo de anécdotas y el transporte de los restos del artista en tren, burro y busetas por el territorio colombiano.
Existen distintas versiones de la historia y es difícil conocer exactamente todos los hechos reales, ya que se ha romantizado y se ha buscado añadir partes y anécdotas que pudieron ser o no verdad a lo largo del tiempo.
Accidente y Exhumación
La historia de Gardel en Caramanta comienza con el trágico accidente aéreo que le quitó la vida al artista y a varios de sus músicos en el Aeropuerto Olaya Herrera de Medellín en 1935. Una vez pasada la conmoción de los hechos, los restos de Gardel fueron enterrados en el cementerio de San Pedro en Medellín.
Inmediatamente se conoce la noticia de la muerte de Gardel, su representante, Armando De Fino, comienza los trámites burocráticos para repatriar los restos del cantante a la ciudad de Buenos Aires en Argentina. Este proceso tuvo sus complicaciones, ya que para repatriar los restos del artista había que realizar una exhumación, y en Colombia no se permitía exhumar un cuerpo sino después de 4 años del fallecimiento de la persona.
Finalmente, De Fino logró obtener todos los permisos y el 18 de diciembre de 1935 se realizó la exhumación de los restos en el Cementerio San Pedro. Los medios de la época relatan que los restos de Gardel se encontraban dentro de dos cajas metálicas, una dentro de la otra. Para preparar los restos para el viaje de repatriación, se colocaron dentro de una nueva caja de zinc, y esta a su vez dentro de una caja de madera, para cumplir con los requisitos de higiene y proteger los restos en su camino.
El viaje a emprender
El trayecto para llevar los restos de Carlos Gardel y sus posesiones, las cuales incluían 20 maletas y 3 baúles llenos de sombreros, partiría desde Medellín hacia Buenaventura por tierra, utilizando distintos medios de transporte. La empresa Expreso Ribón fue contratada para transportar los restos de Gardel junto con sus posesiones.
Algunas versiones indican que parte del contrato de transporte incluía una cláusula de confidencialidad para no revelar el contenido de la encomienda y mantener el transporte de los restos inadvertido. Sin embargo, se puede evidenciar en diarios de la época noticias del paradero de los restos de Gardel en distintos lugares. Si en realidad existía un contrato de confidencialidad, este no fue muy efectivo para pasar por inadvertido el transporte de los restos.
El transporte de los restos comenzó el 19 de diciembre de 1935 desde Medellín, 1 día después de su exhumación. El largo viaje hasta el puerto de Buenaventura, donde continuaría su trayecto en barco, incluiría paradas en La Pintada, Valparaíso, Caramanta, Supía, Marmato y Pereira, entre otras.
En tren, berlinas y hasta mulas
El primer trayecto hacia La Pintada se realizó en tren con la empresa Ferrocarril de Antioquia. Algunas historias indican que la empresa de ferrocarril no cobró la tarifa de transporte como homenaje al artista.
Al llegar a La Pintada, el trayecto continuó en “berlinas”, automóviles de la época usados para el transporte de carga y pasajeros, hasta llegar a Valparaíso.
En Valparaíso, el camino se convertía en caminos de tierra, por lo que fue necesario dejar las berlinas de lado y cargar los restos, las 20 maletas y los 3 baúles de sombreros en mulas y caballos para continuar el trayecto. Este tramo de camino hasta llegar a Caramanta no fue nada fácil, ya que había que subir por un terreno bastante montañoso hasta el cerro donde está ubicado Caramanta.
Gardel llega a Caramanta
En Caramanta, se pueden encontrar distintas historias sobre lo ocurrido durante el paso de los restos de Gardel por el pueblo. El Hotel El Abuelo guarda algunas de estas historias. Una de ellas, plasmada en un documento de la alcaldía, cuenta cómo la caravana de Gardel llegó en la noche del 19 de diciembre. Esa noche, los habitantes del pueblo tuvieron la oportunidad de rendir homenaje al artista en su camino. Otro documento, exhibido en las paredes del hotel, cuenta que la comitiva de Gardel se alojó en el Hotel de Parrita, la misma casa que hoy ocupa el Hotel El Abuelo. Todas estas historias añaden misticismo al recorrido de Gardel y demuestran el impacto y cariño que Carlos Gardel generaba en los colombianos.
En los diarios de la época, el 20 de diciembre de 1935 se anuncia la llegada de la caravana de Gardel a Caramanta.
Algunas paradas inesperadas
El 20 de diciembre de 1935, se continuó el trayecto en mulas desde Caramanta hasta Supía, pasando por Marmato. En Supía, según un funcionario de la empresa de transporte Expreso Ribón, las autoridades civiles y la comunidad del pueblo le solicitaron hacer una parada y pasar la noche para rendir homenaje a los restos del artista. De esta manera, en los diarios del 21 de diciembre de 1935 se registró el paso de los restos de Gardel por Supía.
Después de Supía, el 21 de diciembre la caravana de Gardel llega a Riosucio, el último tramo del trayecto en mula y caballo. A partir de Riosucio, hasta Pereira, el transporte de los restos se realizaría de nuevo en berlina. Algunas versiones de la historia cuentan que los restos de Gardel pasaron por Anserma el 22 de diciembre de 1935, pero estas versiones no han podido ser comprobadas. Parte del misticismo de esta historia son las muchas versiones, lugares y fechas que se le atribuyen al trayecto de los restos de Gardel.
En tren hasta Buenaventura
El 23 de diciembre marca la llegada de la caravana de Gardel a Pereira, donde se realizaría el trasbordo a tren para continuar el camino hacia Buenaventura. Parece que la tarifa de tren en este trayecto tampoco fue cobrada en homenaje al artista. La caravana pasó la noche en Pereira y, el 24 de diciembre, los restos del artista salieron hacia Armenia con destino a Buenaventura.
La caravana llegó en la tarde del 24 de diciembre a Armenia. Se cree que aquí es donde los restos de Gardel pasaron la noche de Navidad.
De Buenaventura hasta Buenos Aires
Diez días después del inicio del viaje, el 29 de diciembre de 1935, se registró la partida de los restos de Gardel desde Buenaventura. Fueron transportados en el barco a vapor Santa Mónica con destino a Nueva York, donde se le rendirían homenaje. Actualmente, los restos de Carlos Gardel se encuentran en el Cementerio de Chacarita en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Algunas teorías buscan explicar la decisión de transportar los restos del artista por tierra en lugar de por avión. Una de ellas sugiere que esta elección fue impulsada por un complot político en Argentina liderado por el presidente de aquel momento, Agustín Justo. Según esta teoría, se buscó prolongar el regreso de los restos de Gardel a Argentina, acompañado de una extensa cobertura mediática, todo para desviar la atención del público del asesinato del senador Enzo Bordabehere.
Los acontecimientos de la historia de los restos de Gardel han inspirado múltiples libros, historias, anécdotas y versiones de los hechos. En cuanto al traslado de los restos en Colombia, existe la novela “La caravana de Gardel” de Fernando Cruz Kronfly, que a través de la ficción busca plasmar cómo pudo haber sido esta odisea para transportar los restos por el territorio colombiano. También hay una película del mismo título dirigida por Carlos Palau, basada en esta novela.